Esquiar
Si visita el país durante el invierno, puede aprovechar la oportunidad para practicar sus deportes de invierno favoritos o iniciarse en alguno de ellos.
Muchas estaciones de esquí en Turquía abren entre noviembre y mayo y están situadas en zonas boscosas de las montañas, donde la altura es moderada. Resultan perfectas para aquellos grupos que deseen esquiar y cuya destreza varíe, desde el novato al aficionado y al experto.
Casi todos los centros de esquí ofrecen formación, por lo que es fácil buscar instructores experimentados. También resulta sencillo adquirir el equipamiento necesario para esquiar.
Puede consultar estos pormenores en el hotel donde se aloje, ya que muchos de los establecimientos de la zona alquilan botas, esquís y ropa apropiada. Habitualmente, estos hoteles también cuentan con telesquí.
Turquía posee numerosas cordilleras montañosas en las que hay estupendas instalaciones para la práctica del esquí. Algunas de ellas serían las estaciones de esquí de Elmadag en Ankara, Saklikent en Antalya, Uludag en Bursa y Davraz en Isparta.
Navegar
En ocasiones, se ha afirmado que el país es ‘el cielo de los navegantes’ para los aficionados a esta actividad. Navegar en Turquía no sólo permite divertirse a bordo de la embarcación, sino que también ofrece la oportunidad de experimentar la hospitalidad de los nativos en las poblaciones costeras.
Hay varias rutas entre las que pueden optar los marineros para explorar el país, desde las azules aguas del Egeo, el mar de Mármara, el Mediterráneo y el mar Negro hasta las ensenadas, calas y playas.
Turquía es la patria del Crucero azul, un recorrido idílico que navega por la llamada bahía de Cleopatra, el monte Olimpo y otros lugares antiguos; el crucero es también conocido como Mavi Yolculuk.
Los largos veranos del país lo convierten en un destino ideal para la navegación. Hay mucho que ver y explorar, incluyendo zonas de gran valor natural, bahías vírgenes, picos montañosos y otros enclaves que reflejan la riqueza histórica y cultural de Turquía.
Hacer parapente
Para aquellos valientes que buscan aventuras extremas, Turquía ofrece muchos sitios estupendos donde disfrutar lanzándose en parapente. Los abundantes terrenos montañosos y las excelentes condiciones climáticas lo convierten en en un destino ideal para practicar este deporte.
Hay diversos servicios en el país que ofrecen cursos de formación en parapente, e incluso pueden ayudarle a conseguir su propia licencia para realizar esta actividad.
Visitar yacimientos arqueológicos
Aún cuando las excavaciones y la arqueología no sean lo suyo, hay muchos sitios en Turquía que quizá le hagan cambiar de opinión. Este país posee yacimientos arqueológicos espectaculares en los que un visitante puede aprender mucho. De hecho, es uno de los destinos preferidos de numerosos exploradores e investigadores especializados procedentes de todo el mundo.
En los yacimientos arqueológicos de este país podrá comprobar las diferentes influencias, empezando desde el paleolítico y llegando hasta el Imperio otomano.
También podrá admirar la magnífica arquitectura de diversas construcciones islámicas antiguas. Existen además numerosos museos, que proporcionan detalles esenciales acerca del desarrollo histórico de muchos enclaves y elementos del paisaje turco.
Algunos de los yacimientos arqueológicos más populares a los que tienen acceso los turistas incluyen Afrodisias, Pérgamo y Éfeso en la región occidental y Hierápolis en la zona de Pamukkale.
Darse el lujo de ir a un spa
Mientras esté en Turquía no debería dejar pasar la oportunidad de probar una de las cosas por las que más conocido es este país: sus centros termales. Se encuentra entre los siete primeros países del mundo en cuanto a la categoría de sus fuentes termales.
Turquía posee más de 1000, debido sobre todo a su situación, ya que se encuentra sobre uno de los principales cinturones geotérmicos.
Son muchos los spa que puede visitar mientras recorre el país. Puede utilizar los servicios de este tipo de instalaciones por muchos motivos: por darse un gusto, por pasar un buen rato con sus compañeros de viaje o para aliviar o tratar un problema de salud. La mayoría de los spa turcos poseen baños minerales naturales que son un lujo para la piel y tienen efectos calmantes.
Muchos de estos locales están situados en Marmaris, Estambul y Pamukkale. Algunos lugares históricos del país se desarrollaron en torno a ricas fuentes minerales, como la antigua ciudad de Hierópolis, donde se encuentra Pamukkale, y la antigua ciudad lidia1 de Cauno.
Si se encuentra en la región de Anatolia, debería acercarse también a los centros termales de ictioterapia de Kangal, situados en la provincia de Sivas. Son conocidos por la miríada de peces que, en sus aguas, contribuyen supuestamente a tratar distintos tipos de enfermedades de la piel.
Hello fellow travelers! My name is Mary and I am the main author of Traveling East. Just like any other travel enthusiasts, traveling has also been our passion! For inquiries, suggestions or anything travel related, please feel free to send us an E-mail at support@travelingeast.com.