Crucero por los fiordos
Últimamente, los fiordos son la atracción número uno en Noruega y el asombro de turistas procedentes de todos los puntos del globo. Son en realidad un magnífico destino para ir de crucero.
Navegar por los fiordos permite admirar el entorno más de cerca. Podrá contemplar las arboladas montañas, las gloriosas cataratas y el agua esmeralda mientras escucha los sonidos de la naturaleza. Es una experiencia inolvidable, en particular porque recorre algunos de los mejores fiordos del mundo.
Un crucero por los fiordos es tanto más especial porque no solo se reduce a las vistas. El barco se detendrá en algunos puertos, permitiendo a los turistas visitar localidades costeras en las que podrán ver museos y galerías de arte, edificios y objetos históricos, acontecimientos culturales, así como experimentar tradiciones locales y practicar deportes y otras actividades al aire libre.
Esquiar
El esquí es el deporte nacional noruego y, como es de esperar, en el país abundan las estaciones de esquí y hay pistas de campo a través. Noruega se presenta como uno de los destinos primordiales en lo que al esquí se refiere, gracias a su nieve polvo y al hermoso paisaje que sirve como decorado a la actividad.
La temporada de esquí empieza en noviembre y se prolonga hasta abril. Durante estos meses, las estaciones reciben gran número de entusiastas del esquí alpino, encantados con la calidad del equipamiento y de las instalaciones de que dispone Noruega. Las ciudades y pueblos de montaña reciben también su dosis de aficionados al esquí de fondo.
Dos de los mejores destinos para esquiar en Noruega son Jotunheimen y Olso, capital de este deporte de invierno en el país. En todos ellos el paisaje es variado, las pistas emocionantes y las vistas increíbles.
Conducir un trineo de perros
Reviva la historia haciendo una excursión en trineo de perros a través del nevado paisaje de la Noruega septentrional. Es una experiencia muy emocionante, impulsada literalmente por perros siberianos (husky) fuertes y experimentados.
Los animales le llevarán por las llanuras, en recorridos que conocen de sobra. Al atravesar estas planicies, inspire el aire fresco y maravíllese ante la belleza invernal de Noruega. El tranquilo panorama se extiende hasta donde alcanza la mirada.
Puede optar por un recorrido de un día o por hacer una excursión durante varios. No se preocupe si es la primera vez que lleva un trineo, porque los adiestradores de los perros le entrenarán para que maneje adecuadamente el tiro. Está formado por cuatro o seis perros, tan ágiles como encantadores.
Las excursiones en trineo de perros suelen hacerse en Finnmark, pero Røros y Trysil también son lugares populares para practicar esta actividad. Los niveles de dificultad varían.
Caminar sobre un glaciar
Pocos son los privilegiados que pueden ver de cerca un glaciar, así que cuando se encuentre en Noruega, aproveche la oportunidad para caminar sobre alguno de ellos. Esta es una aventura única en la vida, que pondrá ante sus curiosos ojos un paisaje diferente.
El panorama en los glaciares es espectacular. Reflejan una luz azul y crean una preciosa paleta de color sobre la helada superficie. Y, algo que muchos desconocen: cambian de forma, se mueven en distintas direcciones, crecen y se encogen.
Gracias a que los glaciares cubren más de 2600 kilómetros cuadrados del territorio noruego, son varios los destinos posibles en este país para dedicarse a esta actividad. Uno de ellos es Jostedalsbreen, considerado el glaciar más extenso de la Europa continental.
No obstante, caminar sobre los glaciares exige la supervisión de un guía autorizado. No es una aventura más, ya que los glaciares siempre están en movimiento y, en ocasiones, se rompen y se hunden. Estará, sin embargo, a salvo, siempre que siga las instrucciones de su guía, esté alerta , lleve el equipamiento apropiado y lo use de la forma correcta.
Por motivos de seguridad, conviene explorar los glaciares formando parte de una excursión guiada.
Ver la aurora boreal
Si durante su viaje a Noruega hace su aparición la aurora boreal, también llamada ‘las luces del norte’, puede considerarse muy afortunado. La famosa exhibición lumínica natural es un tanto evasiva y solo se muestra cuando le apetece.
Aunque, cuando lo hace, el espectáculo es apabullante. De un verde luminoso, parece bailar sobre el oscuro firmamento, mostrándose a veces como un jirón de luz y otras extendiéndose sobre todo el cielo, maravillando a quienes la admiran. Es simplemente mágico y le dejará sin habla durante minutos.
La aurora baila para su público con mayor frecuencia durante finales del otoño y en invierno, hasta principios de la primavera. No tiene horario, así que hay que esperar pacientemente a que aparezca.
Todo el territorio de Noruega es testigo del espectáculo de la aurora boreal, así pues, no importa dónde se encuentre mientras que el clima sea frío y seco (y el momento sea el apropiado). No obstante, algunos de los mejores sitios para contemplarla se encuentran al norte de Noruega, por ejemplo en el cabo norte y en las islas de Lofoten.
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