Explorar el Sáhara
No hay visita Argelia que esté completa sin atravesar el desierto del Sáhara. La parte argelina del Sáhara muestra al desierto en su mejor versión clásica, con dunas de arena, formaciones rocosas, mesetas, oasis y parches de terreno rocoso.
Las excursiones por el Sáhara permiten visitar distintos sitios (Djanet, Tikoubaouine y Tassili, por citar algunos), así como acampar unos días en el desierto. Teniendo cubiertas tan sólo las necesidades más básicas y con un mar infinito de arena alrededor, esta experiencia permite sin duda saborear el estilo de vida de los nómadas.
La exploración puede hacerse por lo general de tres modos: en camello, en un 4 × 4 o a pie. Dependerá de cuánto tiempo tenga y de su apetito de aventuras.
Sea cual fuere el método elegido, tenga por seguro que no sólo le causará impacto el sobrecogedor paisaje, sino que también tendrá su buena dosis de historia cuando llegue a sitios que albergan auténticas muestras de arte prehistórico y rupestre.
Varias agencias de viajes ofrecen excursiones por el Sáhara argelino. Aunque los itinerarios son ligeramente diferentes, todas prometen llevarle al inolvidable y hechizador desierto (y también sacarle de él sano y salvo).
Ir a la playa
Resulta comprensible que el Sáhara sea el destino turístico por excelencia en Argelia, y tiende a eclipsar cualquier otra atracción del país.
Sin embargo, Argelia puede ofrecer mucho más que arenas calientes; de hecho sus arenas frescas y húmedas (las playas) son también destacables.
Visite cualquiera de las playas argelinas para tostarse al sol y disfrutar del panorama costero mientras escucha el relajante sonido de las olas. Si anda buscando algo más emocionante ¿por qué no apuntarse a las distintas actividades acuáticas o a un crucero?
En Argelia las opciones a este respecto son numerosas. La Costa Turquesa es un destino particularmente excepcional que ofrece la posibilidad de practicar distintos tipos de deportes acuáticos.
La región de Bejaia posee algunos de los mejores arenales del país, mientras que Zéralda es un lugar tranquilo y pintoresco. Jijel, popular entre los nativos, presume de la exuberante vegetación que puede admirarse a lo largo de su costa.
Relacionarse con los nativos
Este es el mejor modo de disfrutar de un país y llegar a conocerlo. No tema unirse a los nativos argelinos en sus actividades de ocio. Le darán la bienvenida y le harán sentirse cómodo entre ellos.
Cuando vea a los chavales jugando al fútbol en calles y parques, únase a ellos, y que no le sorprenda que jueguen mejor que usted. Después de todo, el fútbol es uno de los deportes más populares del país y a los argelinos les encanta practicarlo.
Si ve a un grupo de hombres en corrillo jugando al ajedrez, al dominó, las damas o las cartas en una cafetería, acérquese a mirar. Es posible que incluso le inviten a sentarse y jugar.
La hospitalidad es un rasgo habitual en Argelia, así que no dude en hacer amistad con los nativos y aproximarse a ellos. Una de las mejores cosas que puede ganar en un viaje es un nuevo amigo.
Escalar el macizo Ahaggar
En el centro del Sáhara se encuentra el macizo de Ahaggar, también conocido como las montañas Hoggar. Esta cordillera está compuesta principalmente de volcanes extinguidos.
Las rocosas elevaciones suelen tener una altura superior a los 900 metros y el pico más alto, el monte Tahat, se eleva hasta los 3003 metros. Esta cumbre no sólo es la más alta de las Hoggar, si no de todo el país.
Los tuareg, un pueblo que vive en Tamanrasset, la población más cercana al macizo, sirven de guías en los recorridos por las montañas.
Viajar a las Hoggar no es fácil. Al llegar, los montañeros de reciben el saludo de un vasto panorama rocoso y unos picos que se alzan del suelo con una perspectiva imposible.
Al coronar la cima, las vistas del desierto son grandiosas. Como decimos, el recorrido es complicado pero merece la pena.
Visitar lugares religiosos
Puede hacer un viaje por Argelia en el que se otorgue mayor importancia a la reflexión, si se dedica a visitar algunos de sus destinos turísticos religiosos, que permiten apreciar las creencias espirituales de los argelinos y el modo en que han influido sobre la historia y la cultura del país.
Puesto que la religión predominante en Argelia es el Islam, aquí encontrará numerosísimas mezquitas de sobresaliente arquitectura, que han contribuido significativamente a la historia de esta nación.
Una de las más imponentes y relevantes desde el punto de vista histórico es la de Ketchaoua. Situada en Argelia, este templo se convirtió en catedral en 1838 y de nuevo en mezquita en 1962.
También merece la pena visitar la Gran Mezquita de Argel, la Gran Mezquita de Tlemcen, la mezquita de Constantino y la de Al-Kawthar.
Las iglesias católicas también están presentes en Argelia. La basílica de Argel, Nuestra Señora de África, destaca por sus elegantes influencias bizantinas y francesas.
La basílica de San Agustín, en Annaba, es otro importante lugar religioso. La estatua del santo martirizado que alberga la basílica contiene los huesos de sus brazos.
Sea cual fuere la ciudad o población que visite, es probable que encuentre en ella al menos un lugar de carácter religioso. Esto significa que tendrá multitud de oportunidades para aprender cosas sobre la cultura religiosa argelina.
Recuerde que uno de los mejores modos de entender a la gente es observando lo que veneran, honran y aquello a lo que son fieles.
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