Tzatziki
A los griegos les encanta comer, hecho que explica la amplitud culinaria de su gastronomía. Se pueden encontrar restaurantes griegos en cualquier punto del globo, pero nada supera al sabor de los platos preparados con ingredientes caseros en auténticas cocinas griegas.
Un buen ejemplo de exquisitez local es el tzatziki, una salsa que acompaña al pan de pita como primer plato de una comida. Se elabora con yogur, ralladura de pepino, ajo y aceite de Oliva. Los griegos adoran irremisiblemente sus mezedes, o aperitivos, igual que los españoles no pueden pasar sin sus tapas.
El tzatziki es tan solo uno de los aperitivos que encontrará en las mesas griegas. La clave para hacer un tzatziki suculento está en el tipo de yogur que se utiliza.
El tzatziki se sirve frío y en ocasiones se adereza con eneldo, menta o perejil.
Horiatiki
Gracias a la fuerza del sector agrícola griego, tomarse una buena ensalada es una de las mejores experiencias que se pueden vivir en este país.
El horiatiki, conocida normalmente como ‘ensalada griega’ en los restaurantes de Occidente, es una combinación de verdura cruda, aceitunas, queso feta y aceite de oliva.
Esta vistosa receta es tan agradable a la vista como el paladar. La armonía de sabores explota con cada bocado de tomate, pepino y aceituna, mejorados aún más por el queso feta. Horiatiki salata significa ‘ensalada campera’ y este plato básico, y tan querido, aporta un punto rústico a las comidas.
Dolmades, o Dolmadakia
Los viñedos no solo producen algunos de los mejores caldos del mundo: también han generado recetas como la de los dolmades o dolmadakia. Este plato tradicional consiste en hojas de parra enrolladas y rellenas de carne picada.
Los cocineros griegos a veces prescinden de la carne y utilizan berenjena, haciendo el guiso aún más atractivo para los vegetarianos.
Los dolmades vegetarianos pueden servirse tibios o fríos, mientras que la variedad que emplea carne es mucho más deliciosa en caliente.
Las hojas de parra empleadas deben provenir de viñas sin tratar y hay que cocerlas primero para quitarles el amargor.
Souvlaki
El souvlaki es la versión griega de las brochetas, con carne de cerdo cortada en cubos y ensartada en pinchos, hecha a la perfección sobre una parrilla.
Otras variantes de este exquisito plato se encuentran en las tiendas de souvlaki: puede probarlo de pollo, cordero, marisco o verduras.
Una forma popular de disfrutar del souvlaki es enrollarlo en pan de pita y aderezarlo con tomates, cebollas y yogur o mostaza.
Si le entran ganas de souvlaki estando en Atenas, los mejores sitios para buscarlo son la plaza Monastikari y la calle Plastira.
Melomakarona
El melomakarona es uno de los platos de temporada preferidos de los griegos. Se sirve en Navidad y consiste en galletas remojadas en miel con trozos de nuez por encima.
Este manjar se prepara con harina de sémola y lleva sabores como el clavo, la piel de naranja y la canela, que evocan en mayor medida la atmósfera de la celebración. Si le invitan a Grecia durante la Navidad, al entrar en la cocina le dará la bienvenida el maravilloso aroma del melomakarona flotando en el aire.
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